Ruben Leyva.
Rubén Leyva (Oaxaca 1953). Uno de los pintores jóvenes más prolíficos de su generación. Sus estudios los realizó en la Universidad Autónoma Benito Juárez (1972-1975) y, en los años noventas, su inclinación por la cerámica guió sus pasos hasta el Kathy McFadden’s Ceramics Workshop de Portland, Oregon. Una selección de sus muestras individuales dan cuenta de su paso por el museo de antropología e Historia de Oaxaca y por la “Exposición de pintores mexicanos” en Hamburgo (1981). Exhibe en el Instituto Francés de América Latina, en la Ciudad de México (1984), se presenta en la Acevedo Art Gallery de San Diego, California y en la Book Gallery de Madison, Wisconsin.
Expone en el Studio AAA, de San Francisco, Cal. y “Fragmentos de mis sueños” se presenta en la Galería Vale, en la Ciudad de México (1992). Participa en el quincuagésimo aniversario de las Naciones Unidas con una exposición individual, en Nueva York (1995). “Tierra solar”, muestra itinerante, viaja a tres ciudades en Texas (1995-96). “To Play or not to Play” se inaugura en Grosvenor Place Gallery, en la European Academy for the Arts de Londres (1998). Por último en 2004 presentó en Alemania su Obra titulada “Construcción de Sueños y Deseos Ensambles” en la Haus Samson Gallery y en 2007 en Guantánamo, Cuba la presentación del Libro y gráfica “Crónicas de un Jugador”, Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
Rubén Leyva ha participado en múltiples exposiciones individuales y más de cuarenta exposiciones colectivas. Entre las distinciones recibidas están el Primer premio (Premio de Adquisición) de artes Plásticas, Ciudad de Oaxaca, en 1995, además de que su obra fue seleccionada para la edición conmemorativa del Quincuagésimo Aniversario de la ONU. Artista oaxaqueño que ha desarrollado a través de los años una propuesta plástica firme y decidida. Artista multifacético que explora distintas técnicas: dibujo, serigrafía, grabado, collage, litografía, xilografía, cerámica, escultura en bronce y pintura al óleo. Dueño y señor de un Figurativo Abstracto muy personal y siempre distintivo en su obra. Artista revolucionario desde su trinchera, siempre en evolución y siempre congruente con su obra. Leyva, utiliza elementos figurativos muy variados que le dan una expresión siempre vibrante y refinada. Un arte casi infantil que baila y cuenta siempre una historia.
El equilibrio de su obra se ha cifrado en mantener simultáneamente en pie lo poético y lo instintivo, o, si se quiere, lo mental y lo corporal. En su propuesta plástica Leyva, parafrasea simbólicamente en su obra, la idea de Paul Klee “El único propósito de la pintura es hacernos felices”. He indudablemente la obra de Leyva nos conmueve y nos induce a la idea de la felicidad a veces infantil, otras veces subyugada en los colores de su paleta trasformada en arte.
